El frío industrial para los alimentos perecederos. La normativa regula de forma especial el transporte internacional y establece las características de los vehículos especiales adaptados a este fin. La normativa “Acuerdo sobre transportes internacionales de mercancías perecederas y sobre vehículos especiales utilizados en este transporte” establece la manera en la que debe realizarse el transporte de alimentos que necesiten controlar la temperatura, y las características técnicas que deben cumplir los vehículos destinados al transporte terrestre de estas. Así como, los procedimientos que tienen las administraciones para controlar que dichos vehículos cumplan las especificaciones garantizando de esta manera la seguridad.
Según la mercancía perecedera de la que se trate, también, por la distancia entre la recogida y la entrega de la mercancía, todo ello, va a influir en las temperaturas que deben ser controladas durante el transporte. Es decir, según el tipo de mercancía y la distancia a recorrer, la temperatura del transporte puede variar y puede necesitar diferente regulación. Lo que está claro, es que el transporte necesario para realizarlo debe ser especial, con sistema de frío industrial, preparado para transportar alimentos perecederos.
La cadena de frío
La cadena de frío es, el proceso que va desde que el producto es refrigerado o congelado tomando la temperatura necesaria para su conservación, hasta que llega al consumidor final en perfectas condiciones. El producto debe llegar de manera segura, garantizando la calidad del alimento manteniendo la temperatura, preservando sus condiciones desde su origen hasta su consumo.
Queda claro que, durante todo el transporte de los alimentos, es necesario hacerlo en camiones o vehículos que se ajusten a las temperaturas de los productos según su tipología de alimento. El acuerdo dispone las temperaturas a las que deben transportarse las diferentes mercancías clasificadas como perecederas.
También, es importante considerar la ruta y la zona de recogida y entrega por si son lugares calurosos. Siendo así, se debe bajar la temperatura para mantener la mercancía en buen estado. Puede ocurrir, que se deba pasar por zonas de diferentes temperaturas más altas y otras más bajas, y por eso, es imprescindible tener en el vehículo de transporte un sistema de frío industrial, un sistema diseñado de manera ideal, que se adapte a las variables del clima exterior.
En el transporte terrestre se utilizan cámaras frigoríficas, que deben cumplir las características obligatorias, como, por ejemplo, la hermeticidad de la cámara, materiales para el revestimiento, protección de los productos y limpieza, etc. Así como, un sistema de detección de fugas.